Es una hazaña orientarse bajo el agua
Desde los remotos tiempos del siglo IX, el ser humano comenzó a usar la brújula queriendo encontrar el camino, y no hay mejor forma de encontrarlo que teniendo los conocimientos necesarios en navegación.
El invento de la brújula proviene de Asia, donde antiguamente se usaba una aguja imantada sobre un espacio aéreo y más adelante sobre agua, que marcaba siempre el norte magnético de la tierra.
Al saber el norte, ya podemos saber donde se encuentran el resto de los demás puntos cardinales.
Y si te digo que aprender a manejar una brújula mientras buceas puede ser de las cosas más complicadas que te encontrarás? Desde tu primer curso de buceo Open Water deberías aprender su manejo básico, mejorándolo en el curso de Avanzado, y por supuesto por tu cuenta siempre que decidas explorar cualquier punto de buceo del mundo.